De acuerdo a los Objetivos de Desarrollo Sostenible de aquí a 2030, los Gobiernos deben proporcionar acceso a sistemas de transporte seguros, asequibles, accesibles y sostenibles para todos, así como mejorar la seguridad vial, en particular mediante la mejora continua del transporte público, prestando especial atención a las necesidades de las personas en situación de vulnerabilidad, las mujeres, los niños, las personas con discapacidad y las personas de edad.
Por lo anterior, la creación, el fortalecimiento, así como la evaluación y el seguimiento de los Mecanismos de Participación Ciudadana (MPC) son una pieza clave para lograr dicho objetivo. Tales mecanismos deben estar basados en una participación plural y amplia con presencia necesaria de personas clave que pueden tomar decisiones desde los gobiernos locales para responder a las necesidades de peatones, ciclistas y automotores en sus desplazamientos urbanos.
Los MPC deben incorporar una perspectiva de Derechos Humanos y Género desde el inicio de su funcionamiento, así como estar armonizados a los Planes de Desarrollo y Programas de Movilidad Locales, siempre respetando las Agendas Internacionales como los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS).
Dicho fortalecimiento generará un mejor uso en los recursos de movilidad de los entornos urbanos y podrá contribuir a una urbanización inclusiva y sostenible así como a una capacidad para la planificación y la gestión participativas, integradas y sostenibles de los asentamientos humanos en todas las ciudades.
Se debe poner especial atención en la reducción de los siniestros viales que están considerados como unas de las primeras causas de muerte a nivel mundial.